MONTERREY.- Una fiesta clandestina a la que asistieron unos 400 adolescentes, fue “destapada” por un padre de familia que temía que a su hija, menor de edad, le hubiera pasado algo malo.

De acuerdo con las autoridades de San Pedro, Nuevo León, fueron detenidas 11 personas
en un operativo que se extendió de la noche del sábado a la madrugada del domingo 30 de noviembre.

La Secretaría de Seguridad Pública de San Pedro informó que la intervención se derivó de un reporte recibido en el sistema C4, en el que se alertaba sobre un domicilio ubicado en la calle Río Mónaco, en la colonia San Patricio, donde se escuchaba música a alto volumen y se observaba la llegada constante de jóvenes.

Al acudir al sitio, los elementos confirmaron la realización de la reunión.

Minutos después, un segundo reporte encendió las alertas de las autoridades, luego de que un padre de familia informó que su hija menor de edad se encontraba dentro del inmueble y no podía comunicarse con ella, por lo que solicitó apoyo inmediato para verificar su estado.

Ante esta situación, se desplegó un operativo especial encabezado por el secretario de Seguridad Pública de San Pedro, José Luis David Kuri, con la participación de elementos de la Policía municipal, el Grupo de Inteligencia y efectivos de la Guardia Nacional.

El lugar fue asegurado para impedir la salida de personas mientras se desarrollaban las labores de inspección.

Durante la revisión del inmueble, las autoridades localizaron entre 350 y 400 menores de edad, la mayoría en aparente estado de ebriedad.

Algunos de los jóvenes se encontraban desorientados y sin medios para contactar a sus familiares, lo que obligó al resguardo inmediato por parte de los cuerpos de seguridad.

En el sitio se aseguraron decenas de botellas de alcohol, sustancias con características similares a las de alguna droga, un arma corta calibre 9 milímetros, equipos de radiocomunicación, básculas, cascos balísticos y más de 100 mil pesos en efectivo, entre otros objetos que quedaron a disposición del Ministerio Público como indicios de posibles delitos adicionales.

Los menores fueron entregados de manera ordenada a sus padres o tutores, quienes se trasladaron al lugar conforme fueron notificados por las autoridades.

En tanto, los presuntos organizadores y trabajadores del evento, un total de 11 personas, fueron detenidos y llevados a las instalaciones del C2 municipal para su certificación médica y posterior puesta a disposición del Ministerio Público.

La Secretaría de Seguridad Pública reiteró que mantiene una política de cero tolerancia frente a este tipo de prácticas y exhortó a la ciudadanía a denunciar cualquier evento clandestino a través de la línea de Atención Ciudadana vía WhatsApp al 81-12-12-12-12, o mediante llamada telefónica al (81) 8988-2000, ambos disponibles las 24 horas del día, los siete días de la semana.